A pesar de los centenares de amparos promovidos en contra de la nueva legislación laboral, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que si bien tienen derecho a inconformarse los dirigentes sindicales, la "reforma va", porque hay otras expresiones sindicales que pugnan porque haya democracia en las organizaciones de trabajadores.
"Nosotros no vamos a solapar a líderes antidemocráticos" agregó el mandatario quien consideró que los dirigentes deben entender que ya son otros tiempos y debe haber democracia sindical. "No es la misma realidad, no puede haber, para decirlo coloquialmente charrismo sindical".
Cuestionado sobre los litigios ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación contra la reforma, dijo que uno de los objetivos es que exista un voto libre y secreto para la elección de dirigentes. Citó como ejemplo el caso de los petroleros, donde los trabajadores debían votar con su credencial.
López Obrador consideró que debe haber ya democracia sindical y en todo el país porque a lo largo de la historia, según dijo, solo ha habido destellos democráticos en el gobierno de Francisco I Madero, porque "ni los liberales a los que admiro tanto tenían demasiado apego al poder".
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